Movimiento pasivo continuo para rodilla

El movimiento pasivo continuo es un procedimiento postoperatorio diseñado para brindar apoyo en la recuperación del paciente después de una cirugía articular. Aunque también puede utilizarse posterior a un procedimiento quirúrgico de tejidos blandos o un trauma.

El equipo que se utiliza es un movilizador pasivo de rodilla o knee CPM, por sus siglas en inglés. Esta unidad se usa típicamente después de la operación para el reemplazo total de rodilla y las reparaciones del ligamento cruzado anterior (LCA). Después de una cirugía articular extensa, los intentos del paciente de flexión articular pueden causar un dolor considerable, disuadiendo al paciente del movimiento articular efectivo. La imposibilidad de lograr una flexión de rehabilitación adecuada puede provocar el endurecimiento del tejido alrededor de la articulación.

Eventualmente, esta condición puede causar adherencias intraarticulares (formación de tejido cicatricial) y contracturas extraarticulares (acortamiento de un músculo o tendón). Esto puede provocar la limitación del rango de movimiento para la articulación. El movimiento pasivo continuo para rodilla se realiza de forma gradual y lentamente sin el uso de los músculos del paciente. El equipo se utiliza después de la operación y en el hospital o en casa. El médico prescribirá instrucciones de uso, como son grados, velocidad, y tiempo. Existen estudios que han concluido que los pacientes que utilizan el movilizador pasivo de rodilla reducen el riesgo de complicaciones y requieren menos medicamentos para el dolor.

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